Bloque 3

¿A qué fuentes debe recurrir para informarse sobre el COVID-19?

¿A qué fuentes debe recurrir para informarse sobre el COVID-19?

Con los antecedentes que proporcionan las web de la Organización Mundial de la Salud, OMS o de la Organización Panamericana de la Salud, podrá conocer antecedentes  de importancia sobre el desarrollo de la pandemia y comentarios sobre el trabajo que los investigadores desarrollan para producir una vacuna contra el virus.
Escuche a continuación los siguientes tips que nos entrega el Dr. en Salud Pública de la Universidad de Harvard y docente de nuestro Plantel.
 

STGO TV transmite documental que aborda expresión artística del poeta Raúl Zurita en los acantilados de Pisagua

STGO TV transmite documental que aborda expresión artística del poeta Raúl Zurita en los acantilados de Pisagua

El próximo domingo 27 de septiembre a las 21:00 horas, a través de las pantallas de STGO TV Señal 50.1 TVD y Zappingtv 124, el programa Miradas de Autor transmitirá el trabajo audiovisual “Zurita, veras no ver”, de la documentalista Alejandra Carmona.

La intervención artística del recientemente nombrado Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana y Premio Mario Benedetti a la lucha por los Derechos Humanos, comprendió 22 frases proyectadas con luz sobre los roqueríos de la costa norte de Chile, que sólo pudieron verse desde el mar a medida que anochecía y hasta que se desvanecieron con el amanecer.

Este proyecto es el cierre de una trilogía de intervenciones del vate nacional que  comenzó en 1982, cuando en un acto marcado por los acontecimientos del golpe militar, utilizó cinco aviones y escribió su poema “La nueva vida”, sobre los cielos de la ciudad de Nueva York.

La segunda parte la realizó en 1993, con la rúbrica “Ni pena, ni miedo” que expuso con la ayuda de una retroexcavadora en el Desierto de Atacama. La frase tuvo una longitud de 3 mil metros de largo, que solo fue posible visualizar desde un avión, e incluso en Google Earth.

Luego de dos décadas, Zurita concluyó su obra monumental con “Verás un dios de hambre” poema que contiene las 22 frases que fueron proyectados en los acantilados de Iquique y Pisagua.

Documental

Eduardo Lobos, productor del documental “Zurita, verás ver”, comentó a Usach al Día que esta pieza audiovisual comenzó como una idea de su directora Alejandra Carmona, que venía desarrollando una propuesta anterior sobre el tema de la muerte desde un punto de vista filosófico, hasta que tocó la puerta del poeta Raúl Zurita.

“Zurita y sus intervenciones poéticas y políticas vienen desde fines de los años 70`, por lo que es un personaje que tiene una historia enorme en torno a estas expresiones artísticas y poéticas junto al grupo CADA”, señaló Lobos.

El Colectivo de Acciones de Arte (CADA), fue fundado por los artistas Fernando Balcells, Damiela Eltit,  la recientemente fallecida, Lotty Rosenfeld, Juan Castillo y Raúl Zurita. Sus intervenciones en el espacio urbano santiaguino perseguían llevar a cabo un cambio socio-político de la sociedad chilena y de las condiciones de un Chile en dictadura.

El grupo se amparaba en una concepción que visualizaba a la ciudad como un museo; a la sociedad como un grupo de artistas y a la vida como una obra de arte, la que por cierto era posible cambiar.

El objetivo principal del proyecto, en su origen, fue realizar esta ruta que hacía el poeta a los acantilados de Iquique y Pisagua, pero que con el tiempo se fue modificando. “Si bien se mantuvo como eje fundamental dentro del proyecto, empezaron a aparecer otros elementos que se fueron cruzando con la misma vida de Raúl con su trabajo poético y político”, aseguró el productor del documental.

Finalmente, Eduardo Lobos señaló que “trabajar con Zurita fue una experiencia muy interesante porque tuvimos la posibilidad de viajar con él a Pisagua, a Boston y al sur de Chile, lo que generó que nos diéramos cuenta que era un personaje muy real, no como la imagen típica del poeta, sino que una persona de carne y hueso. Fue un aprendizaje, porque al estar junto a él logramos tener una visión más cercana de su poesía”.

La vida como una obra de arte

Rafael Rubio, poeta y académico del Departamento de Lingüística y Literatura de la Facultad de Humanidades de nuestra Universidad, se refirió al pensamiento poético del vate nacional. “El ideario de la poesía de Raúl Zurita guarda relación con la concepción de la vida como una obra de arte a completar y corregir. Su compromiso con los derechos humanos es el de toda poesía verdadera; la defensa y la reivindicación del derecho a respirar, a amar, a soñar,  el derecho a nacer a cada instante de la vida, frente a toda evidencia de la muerte”, reflexiona.

En cuanto a la relación entre la poesía de Zurita y sus propias intervenciones en espacios abiertos de nuestro país, Rubio señaló que “es un trazado urbano, una construcción planificada con rigor de ingeniero. Las intervenciones en la ciudad tratan de superar los márgenes de la página escrita, hacia la vida social, hacia el espacio público. La poesía de Zurita es un intento de superar la poesía a través de la poesía. Se trata, en definitiva, de la vida escrita, más que de una escritura vivida”. 

El académico de la Usach concluye indicando que el reciente otorgamiento del Premio Reina Sofía a Zurita “es el reconocimiento de la gran tradición española a una obra que no calza en sus cánones, pero que se impuso en definitiva como contraparte de un lenguaje castizo, y que enriquece el legado de la poesía en español, al inocular en ella influencias diversas, poco habituales en dicha tradición”. 

Opinión del Dr. Cristián Parker: El COVID-19 y el impulso hacia la docencia virtual en las universidades sudamericanas: el caso chileno

Opinión del Dr. Cristián Parker: El COVID-19 y el impulso hacia la docencia virtual en las universidades sudamericanas: el caso chileno

Nadie anticipó que el alcance global de las medidas de confinamiento para enfrentar el COVID-19, iba a transformar a la docenciavirtual en una experiencia global. En efecto, la pandemia ha puesto de manifiesto varias dimensiones educativas –que ya venían experimentándose desde hace décadas en b-learning o e-learning–, pero que, bajo esta situación de excepción, involucróa todas las universidades tradicionales. El caso es que la pandemia aceleró un proceso de transición de universidades que tradicionalmente funcionaban bajo modalidad presencial y les obligó a saltar hacia el siglo XXI, abriéndose rápidamente hacia la docencia no presencial.

A nivel mundial y latinoamericano (Campi, 2020; Hinojo y Fernández,2012) ya se observaba queel avance en las tecnologías de la comunicación y la información (TICs) les había ofrecido la oportunidad a las universidades de incrementar sus estudiantes on line. Ello representaba uno de los factores críticos de la educación superior en este siglo XXI (Drew, Redding y Harley, 2019). Pero nadie en los países sudamericanos estaba preparado pare que una emergencia de este tipo adelantara semejante proceso.  

En el presente trabajo exploramos la experiencia de las universidades chilenas tradicionales, que por lo demás, dada la información disponible, resulta ser una experiencia compartida para todo el continente sudamericano.

La Pandemia y las medidas de emergencia

Como en todo el mundo la llegada del virus COVID-19 a Chile y Sudamérica significó, desde marzo de 2020, una serie de medidas de emergencia sanitaria y socioeconómica.  El confinamiento y la cuarentena afectaron decisivamente la vida normal en los diversos ámbitos de la sociedad: la familia, el trabajo, la escuela, las instituciones públicas, las empresas e industrias, el comercio, el turismo, la recreación y los deportes.

La pandemia afectó especialmente el funcionamiento de la educación.  Se tomaron medidas en Chile como en toda América Latina (UNESCO, 2020).  En Chile, desde el 16 de marzo el Ministerio de Educación canceló totalmente las clases presenciales en jardines de infantes y establecimientos de educación básica, media y superior.  Todas las universidades decidieron tomar la misma medida y emprender las clases de manera virtual. A la fecha de escribir este artículo (fines de julio de 2020) las clases presenciales en el sistema educativo permanecen suspendidas y se prevé que el primer semestre en este hemisferio sur (agosto) finalice con educación a distancia.

Docencia virtual en las Universidades y el Postgrado

La docencia virtual en las universidades se aplicó a todos los niveles y modalidades educativas.  Dado que las curvas de contagios no han cesado significativamente, y se temen rebrotes, es probable que el segundo semestre (septiembre 2020- enero 2021) también sea dictado por medios virtuales.

En cuanto al postgrado, su oferta no presencial en Chile desde 2010 se había venido incrementando, pasando de 18 programas en 2011 a 107 en 2020. Sin embargo, esa oferta no representaba, en enero de 2020, sino el 5,1% de la oferta total de programas de postgrados universitarios en el país[1]. La Pandemia ha cambiado radicalmente este panorama y en el trascurso del 2020 la totalidad de las universidades estaba ejerciendo la docencia a distancia tanto en pregrado como en postgrado.

Todo ello ha significado una adaptación de proporciones para la cual no todas las instituciones y el personal estaban preparados. Este proceso adaptativo ha sido múltiple y en distintas dimensiones:  a las tecnologías que posibilitan la docencia virtual y el teletrabajo; a las nuevas metodologías y didácticas que exige la educación virtual, en fin, a las nuevas condiciones de vida, estudio y trabajo en situación de confinamiento y cuarentena.

Un gran impacto de este paso a la virtualidad en la docencia de pregrado y postgrado fue descubrir enormes desigualdades en el acceso a la educación virtual. Estudiantes vulnerables sin acceso a internet o sin computador fueron entonces visibles. Y las universidades tomaron un conjunto de medidas para superar esas brechas: las becas de conectividad se multiplicaron por miles.Pero la desigualdad no se da solamente en cuanto a acceso e infraestructura: tan relevante resulta también el diferencial de alfabetismo científico (López y Parker, 2009) y la brecha digital de los usuarios.

Docencia de Postgrado a distancia

Las universidades chilenas tomaron una serie de medidas para implementar las clases de manera virtual lo cual implicó nuevas relaciones y procesos. La docencia virtual supone nuevas condiciones de la relación profesor/alumno; nuevas condiciones de la gestión docente y curricular, así como nuevas condiciones de la gestión institucional (USACH, 2020; UNIE, 2020; UdeChile, 2020; VIPO, 2020).  Y en el proceso mismo de enseñanza-aprendizaje surgen, como un gran desafío, los sistemas de evaluación no presencial (CRUE, 2020).

Nuevas formas de gestión curricular y didácticas surgen para evitar seguir haciendo las clases como si no hubiera pasado nada y todo fuese como en la modalidad presencial. La docencia virtual no es transmisión de información, sino la generación de conocimiento (García-Gutiérrez y Ruiz-Corbella, 2020) por medio de aprendizajes activos y autoaprendizajes (Area-Moreira, 2020). No resulta fácil en la experiencia actual, dado que no hay hábitos en las universidades tradicionales para un método educativo centrado en el alumno y no en las tecnologías (Sangrà, 2020).  Todo ello trae como consecuencia el desafío de la reeducación de los educadores (Area-Moreira, 2020), todo un programa que muchas universidades apenas vislumbraban.

Desafíos emergentes

En la experiencia de estos meses va surgen variados temas emergentes: nuevos desafíos para las universidades tradicionales -varios de los cuales ya trabajados por las universidades a distancia - en la construcción de estos nuevos espacios virtuales de enseñanza-aprendizaje. Reseñamos algunos.

En primer lugar, se descubre que no todo puede hacerse de manera no presencial. Talleres y trabajos de tesis que requieren experimentación en laboratorios o trabajos en terreno quedan postergados o abortados por el confinamiento y cuarentena.

En segundo lugar, el imprescindible rol activo de parte de los estudiantesimplica un esfuerzo pedagógico de empatía y retroalimentación.

En tercer lugar, la educación virtual no puede nunca descuidar el aseguramiento de la calidad educativa y los procesos de regulación normativa y de autorregulación docente.

En cuarto lugar, la construcción de nuevos espacios virtuales de enseñanza-aprendizaje supone apoyo y cambios institucionales que requieren servicios y plataformas especializados, incluyendo políticas y normativas institucionales (Campi, 2020).

En quinto lugar, se toma consciencia de que se trata de iniciativas educativas con fines de bien público, orientadas a la formación integral de personas con la finalidad de contribuir al desarrollo integral de nuestros pueblos y países. Ello supone eludir la tentación tecnocrática y economicista de emplear la educación virtual sirviendo el interés particular o comercial de los individuos o de la institución.

En sexto lugar, la dimensión ética no sólo se refiere a la propiedad común del conocimiento. La ética de los datos, en cuanto al uso de la información(generación, registro, procesado, distribución, uso) y algoritmos (inteligencia artificial, aprendizaje automático, robótica) deben considerarse. Todo ello en el marco del cumplimiento de la responsabilidad social universitaria (Tsilikis, 2020).

En séptimo lugar, se descubre que más allá del cambio metodológico y pedagógico se trata de un verdadero cambio cultural. La educación virtual es parte del tránsito hacia una sociedad virtual, con un rol enorme de las NTCI y de la IA, y no es sólo un cambio tecnológico: es un cambio societal y cultural.

Acelerando una transición hacia el futuro

Las medidas extraordinarias que han debido tomarlas universidades por causa de la Pandemia les han llevado a privilegiar los medios electrónicos para impartir la docencia. Estas medidas parece que han llegado para quedarse. No veremos a las universidades tradicionales transformarse en universidades a distancia.  Más bien se acentuará una tendencia que ya se había iniciado en países desarrollados y en Europa. Por una parte, varias universidades iberoamericanas – destacando algunas españolas - habían sido pioneras en educación a distancia; por otra parte, universidades de gran trayectoria como  Cambridge ya habían iniciado una política de poner a disposición del público sus cursos y recursos on line.  Pero lo que vemos es distinto. Se trata de que con toda probabilidad las universidades tradicionales chilenas y sudamericanas incorporarán de manera masiva tecnologías digitales, y el e-learning y el b-learning serán empleados sistemáticamente para impartir docencia.

Las carreas de pregrado que se impartan de manera no presencial dependerán de las propias capacidades institucionales, pero lo cierto es que a nivel de magister o master esta modalidad se verá incrementada. En cuanto al b-learning se espera que esta modalidad se generalice a nivel de postgrado, especialmente en el nivel de Magister y Doctorados. De esta forma la pandemia habrá impulsado, de manera inesperada, una aceleración a una transformación de las universidades tradicionales volcándose a mediaciones tecnológicas y de IA, que en este siglo XXI se venía venir, aunque era esperada para más adelante.

Opinión de la Académica del Departamento de Filosofía, Dra. Diana Aurenque: ¡Por fin llegó septiembre!

Opinión de la Académica del Departamento de Filosofía, Dra. Diana Aurenque: ¡Por fin llegó septiembre!

Esperemos que septiembre traiga más viento y lluvia que nunca, que nos truene encima y nos despierte con su fuerza histórica del letargo que esta pandemia no sólo nos tapa la boca, sino que proclama victoriosos a los que nos creen idiotas. Idiotas, recordemos, se decía en Grecia a quien sólo tenía en cuenta sus intereses privados y particulares, y no las cuestiones públicas. Este 2020 parece ocurrir más bien en el calendario que en las vivencias y experiencias.

Desde marzo y hasta hace pocos días existimos a medias, sobreviviendo encerrados para protegernos y cuidar a los demás, habitando vidas incompletas, sobreviviendo biológicamente, pero carentes en gran parte de lo que nos es indispensable en tanto humanos.

Entre el sueño y la vigilia acontecemos exigidos por mantener la televida y el teletrabajo (de contar con él), exigidos por el imperativo sanitario a transformarnos en seres sin familia y amigos, sin ritos ni fiestas, sin música y baile, sin arte y cultura, e incluso, sin montañas, bosques, playas ni campo.

Nos mantenemos sanos hipotecando nuestra vida. ¡Pero por fin llegó septiembre! Para quienes habitamos esta tierra jamás se trata de un mes entre otros, porque septiembre es un viento, un trueno, unas cuantas ideas y mil heridas. Septiembre y sus paradojas duelen, pero como dijo Nietzsche, el dolor nos profundiza.

El mes de las ideas de la patria, de sus albores y de sus ocasos, tensiona a Chile entero; y hoy más que nunca: celebra un origen mientras se acrecienta la disputa con el pueblo mapuche; vitorea a las Fuerzas Armadas y a Carabineros de Chile en el día de las Glorias del Ejército de Chile, mientras aún no se lleva a cabo una reforma profunda a ambas instituciones; simula que el 11 de septiembre no existe, que sólo fue una avenida en Providencia, que no violaron y experimentaron con seres humanos, que no hubieron muertos, ni torturados, ni desaparecidos. Pero septiembre también es denuncia. Sin fondas, se mantiene el narcótico patrio vigente; con indicaciones del “fondearte” en casa confusas, desorientadoras e irresponsables.

Esperemos que septiembre traiga más viento y lluvia que nunca, que nos truene encima y nos despierte con su fuerza histórica del letargo que esta pandemia no sólo nos tapa la boca, sino que proclama victoriosos a los que nos creen idiotas. Idiotas, recordemos, se decía en Grecia a quien no se ocupaba de asuntos políticos, de quien sólo tenía en cuenta sus intereses privados y particulares, y no las cuestiones públicas. Y es cierto que la vida privada importa, pero lo privado, aprendemos, siempre tiene un ribete político. En la intimidad de la televida, los televisores de cada mañana chilena nos inundan con personajes públicos que parece sólo atienden a intereses particulares. Los alcaldes se han posicionado como las grandes figuras políticas, rehabilitando en parte su clase, precisamente por atender los agobios de sus conciudadanos. En ese contexto, incluso se han levantado dos figuras como posibles candidatos presidenciales, Joaquín Lavín y Evelyn Matthei. ¿No es esto escandaloso? Por cierto, una trampa, como dice justamente la palabra escándalo. Lavín y Matthei se falsifican abiertamente para abrir paso a sus ambiciones.

Incalculables son los memes que recorrieron las redes sociales desde que Lavín se autoproclamó “socialdemócrata”; pero de su apoyo a la dictadura, de su militancia al Opus Dei, de su pinochetismo, el alcalde mantiene toda reserva. Matthei, por su parte, lo hace con elegante descaro; y ante la simple pregunta de si se posicionará a favor del “apruebo” o “rechazo”, la alcaldesa mantiene el más hermético de los silencios.

Con franqueza, ¿no nos merecemos mejores políticos?, ¿personas que tengan una orientación ideológica clara, sea la que sea, pero que la expongan?, ¿con el valor de defender ideas, dar argumentos y no sólo callar para no perder al votante posible?, ¿con colores definidos, coherentes consigo mismo al menos y su trayectoria, y no seres miméticos que bailan al son de las encuestas de popularidad y del ranking televisivo? ¿Y no es curioso que precisamente de donde se levantan los candidatos, los matinales en particular, sean los programas que mayores denuncias han tenido en el último tiempo ante el Consejo Nacional de Televisión (CNTV)? No puede ser la televisión, ni los medios de comunicación digitales como Twitter o Instagram, los lugares emblemáticos de la política ni los únicos proveedores de su contenido. Pues su elemento fundamental es otro: las convicciones, visiones de mundo e ideologías. Pero la ideología, sabemos, es peligrosa y quizás por ello el oportunismo populista sea más seguro. Este septiembre 2020 nos lo recuerda.

Hace 50 años, un 4 de septiembre, también se inició un proyecto, se intentó levantar una idea que, por utópica incluso que la consideren algunos, era al menos eso: una idea, abierta, pública, valiente y comprometida con una visión de mundo. Política de verdad que terminó bombardeada y con un presidente muerto. Y de bien poco sirve polemizar, como intentan confundir algunos, si Allende era un socialdemócrata o un marxista leninista, porque terminó muerto y Chile, hasta hoy, con ello desgarrado. Mejor pensemos lo que significa tener políticos que viven y sobreviven como camaleones, arcaicos enamorados de los votos e infieles a todo, incluso a sí mismos. Y como si a septiembre le faltara incumbirnos más, hoy prepara un plebiscito.

En plena pandemia, con desconfinamientos que preocupan a los expertos y a la sociedad civil por sus inconsistencias: aperturas de malls para tres mil personas, permisos para “fondearse”, pero cierre continuo de plazas y parques durante los fines de semana.

El temor de que los contagios suban no es sospecha infundada, sino el rumbo más esperable; basta ver cómo España, Alemania e Italia han subido en sus tasas de contagios. ¿Y qué pasa si se avecina una ola de contagios en octubre? ¿Un octubre histórico que busca refundar septiembre? Todas las medidas deben ser tomadas para asegurar que el 25 de octubre tenga lugar. Porque el plebiscito, por imperfecto que haya sido el acuerdo de noviembre 2019, es un logro de la ciudadanía en su conjunto y debe protegerse. Ninguna enfermedad que no haga a un ciudadano interdicto debería despojar a una persona de su derecho fundamental de sufragio; más aún en una ocasión tan definitoria para el país. El gobierno debe asegurar que todos, también los infectocontagiosos, puedan emitir su voz en este proceso. Todo lo demás sería abiertamente discriminatorio y cobarde.

Sea de la forma que sea, con voto digital o presencial, todos y todas debemos poder pronunciarnos y defender con un voto las convicciones, los sueños y los anhelos que tenemos y que, estoy segura, tienen más peso y más profundidad que las acrobacias oportunistas de quienes sólo sonríen a las cámaras y bailan al ritmo de cualquier voto.

Laboratorio de Prototipado del Centro de Innovación Usach desarrolla dispositivo certificador de mascarillas quirúrgicas

Laboratorio de Prototipado del Centro de Innovación Usach desarrolla dispositivo certificador de mascarillas quirúrgicas

Bajo el contexto sanitario en el que nos encontramos, y desplegando esfuerzos para desarrollar avances e innovaciones que ayuden a la contención del COVID-19, el Centro de Innovación, a través de su Laboratorio de Prototipado, junto a los departamentos de Química y Mecánica, todos de la Facultad de Ingeniería, han estado trabajando en la construcción de soluciones para afrontar las distintas aristas requeridas por esta pandemia mundial.

El Laboratorio de Prototipado del Centro de Innovación Usach desarrolló un dispositivo certificador de mascarillas quirúrgicas que consiste en medir la resistencia de penetración de sangre sintética en mascarillas quirúrgicas, cuya función es detectar la permeabilidad de estas, permitiendo valorar la efectividad de cada uno de los modelos testeados. Este artefacto, es aplicable para todas mascarillas que sean de uso quirúrgico y se encuentran dirigidas principalmente a los funcionarios del área de la salud.

Este nuevo trabajo colaborativo, responde a las necesidades instauradas por el Instituto de Salud Pública, ISP, sobre la verificación y certificación de elementos de protección personal (EPP) de mascarillas fabricadas dentro del territorio nacional en base a la norma internacional 1862, que tienen al Laboratorio de Investigación y Control de Calidad en Cueros y Textiles, Lictex, como entidad validadora de estos insumos.

Según palabras de Francisco Sepúlveda, académico del Departamento de Mecánica, este es uno de los ensayos críticos a los que se deben someter las mascarillas quirúrgicas para ser verificadas o certificadas, de acuerdo a los estándares de calidad dispuestos por la Organización Mundial de la Salud, OMS.

“Este método de prueba se utiliza para evaluar la resistencia de las mascarillas quirúrgicas a la penetración por el impacto de un pequeño volumen (aprox 2 ml) de sangre sintética de alta velocidad, emulando el rompimiento repentino de una arteria a 30 cm de la mascarilla, determinándose visualmente la penetración de sangre sintética”, comentó.

De esta manera, el profesional, consideró este dispositivo como un gran aporte para los funcionarios de la salud y para los elementos que serán usados en ambientes laborales, los que también consideran al ecosistema de la Universidad, ya sea tanto para el alumnado en general, como también para los académicos, investigadores y funcionarios.
“Para la Usach esta iniciativa ha sido una gran oportunidad para valorar las competencias de nivel técnico, académico y de investigación existentes en los diferentes grupos de colaboración de la Universidad. A su vez, también sirve como vitrina para mostrar las capacidades que tiene el Lictex a nivel nacional, al ser considerado ente verificador del ISP, Corfo y del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación”, dijo Sepúlveda.

Por su parte, Alejandro Gutiérrez, director del Centro de Innovación, comentó el grado de relevancia que tiene este tipo de certificaciones a nivel nacional, poniendo énfasis en que, “hoy en día las certificaciones están más relacionadas con la seguridad y el impacto que puedan generar estas en los productos, más aún en este escenario de pandemia. 

Los laboratorios deben garantizar que los elementos que se evalúan dentro de sus espacios, no producirán daño a los usuarios, por lo tanto, somos un eslabón importante en la cadena que garantiza la salud de las personas”.

Comprometidos de la mano de la tecnología

El Laboratorio de Prototipado del Centro de Innovación tuvo un rol fundamental en lo que respecta el diseño y rediseño de partes y piezas consideradas de primera necesidad en la confección del soporte de la jeringa de penetración de sangre. Las capacidades tecnológicas y el compromiso profesional de los integrantes de esta área fueron esenciales para aportar en la creación de este nuevo dispositivo certificador.

José Arias, encargado del laboratorio, destacó los desarrollos efectuados por este espacio creativo. “Las labores realizadas para este dispositivo se concentraron en trabajos de cortes de partes y piezas en acrílico, que fueron desarrolladas por nuestra cortadora láser Router RC-1390L. La impresión 3d se realizó a través de la impresora PRUSA, donde se ocupó PLA como material para luego dar paso al proceso de armado final del prototipo. La confección total para un modelo de esta envergadura fue de cinco días hábiles, mas menos, incluyendo el pegado de los acrílicos con cloroformo”.

Los elementos de última generación con los que cuenta el Centro, han permitido dar un mayor flexibilidad y rapidez a los dispositivos que requieren de una alta precisión tecnológica en su confección. Esto, sumado al trabajo colaborativo desarrollado por diferentes profesionales de la ingeniería y otras áreas multidisciplinarias que han demostrado una sinergia y responsabilidad con las innovaciones que van dirigidas a combatir la propagación del Coronavirus.

El equipo del Laboratorio de Prototipado del Centro de Innovación lo integran, además, la encargada de diseño y prototipado, Lorena Durán, y el encargado de mantención de equipos, Héctor Valdés.

Desde el inicio de la pandemia el Centro de Innovación ha dicho presente con distintas iniciativas que van dirigidas a la contención y el cuidado del Coronavirus poniendo a disposición sus capacidades tecnológicas y asesoría profesional.

El desarrollo de escudos faciales de mica transparente, el corte de 10.000 filtros en tela TNT para mascarillas de Promascara de PRECREA, la evaluación de modelos para viseras 3D, la confección de una cabeza a escala real con material PLA para el mismo Lictex, el ventilador portátil de PROCID, y el desarrollo del respirador artificial MIT, son sólo algunos de los elementos trabajados dentro de su Laboratorio de Prototipado.

¿Cómo debemos enfrentar el desconfinamiento?

¿Cómo debemos enfrentar el desconfinamiento?

El correcto y permanente lavado de manos; la utilización de mascarilla y el distanciamiento físico siguen siendo las herramientas más efectivas para no contagiarnos. Sin embargo, y ante la alta movilidad que se observa en las calles del Gran Santiago y el desplazamiento de muchas personas en el Metro o en la locomoción colectiva, se hace necesario reiterar algunas sugerencias para cuidarnos entre todos.  Estas son sus recomendaciones.

 

Patricio Santamaría ante plebiscito: “Tenemos un protocolo sólido que garantiza la seguridad a todos y que está siendo solicitado por otros países”

Patricio Santamaría ante plebiscito: “Tenemos un protocolo sólido que garantiza la seguridad a todos y que está siendo solicitado por otros países”

El presidente del Consejo Directivo del Servel, comentó que el plan de seguridad que contiene el protocolo sanitario fue elaborado con diversos organismos y se ratificó con la Organización Mundial de Salud, la Organización Panamericanana de la Salud, la Onemi, la Cruz Roja y otros actores.

“Tenemos un protocolo solido que garantiza la seguridad a todos y que está siendo solicitado por otros países”,  sostuvo Santamaría.

Explicó que desde un comienzo habrá una innovación en los lugares de votación, los que este año aumentaron en un 26%: las puertas del local estarán cerradas para garantizar el aforo máximo de 10 personas por mesa que vayan a votar.

Escuche más antecedentes sobre este protocolo en el siguiente podcast de Radio Usach
 

Académico Maximiliano Salinas expuso en Feria Internacional del Libro de Lima 2020

Académico Maximiliano Salinas expuso en Feria Internacional del Libro de Lima 2020

En el marco de una nueva versión de la Feria Internacional del Libro de Lima, el historiador de nuestra Universidad, Dr. Maximiliano Salinas, fue invitado por la Universidad Antonio Ruiz de Montoya, a través de su revista institucional interdisciplinaria Silex, para presentar el número correspondiente al primer semestre 2020.

El tema central de esta nueva edición fue "Identidades y otredad. Factores de discriminación, intolerancia y exclusión".

El profesor Salinas fue invitado en representación de los autores de este nuevo número. “Mi contribución fue hacer una interpretación de la historiografía chilena entre 1980 y 2010. Es un examen de los horizontes culturales de referencia de dicha historiografía según el canon occidental de la civilización y la barbarie. Este canon, que se remonta al pensamiento grecolatino clásico, divide y opone a la humanidad entre lo culto / lo inculto, lo permitido / lo prohibido, raíz epistémica y política de discriminaciones, intolerancias y exclusiones”, aseguró el académico Usach.

Durante esta exposición online estuvo presidida por la directora de la revista, la doctora en Filosofía por la Universidad de Frankfurt, Alemania, Soledad Escalante, y el vicedirector de la misma, el doctor en Filosofía por la Universidad de Comillas, España, Gonzalo Gamio, escritor y profesor en la Pontificia Universidad Católica del Perú. 

Identidad y otredad actual

El Dr. Salinas resaltó la importancia del debate y reflexión de estos temas en los tiempos presentes en donde la crisis sanitaria y también la de gobernabilidad del modelo socioeconómico imperante, han sido de suma importancia en la actualidad nacional y mundial.

¿Cuál es la importancia que usted le da a esta participación en la Feria Internacional del Libro de Lima 2020, en época de pandemia?

La pandemia nos vuelve inesperadamente próximos en el tiempo y en el espacio. La participación en la Feria Internacional del Libro de Lima 2020 se hizo posible sin necesidad de viajes y alojamientos. Los distanciamientos físicos no han impedido la comunicación humana y académica. Desde nuestra perspectiva esto es valioso para el diálogo de las ciencias humanas y sociales. En ese diálogo crecemos y nos acercamos.

Dado que su tema fue la otredad y las identidades, y pasado 50 años del triunfo de Salvador Allende y conmemorado un año más del golpe de Estado de 1973, ¿cómo ha variado la identidad chilena en tiempos de neoliberalismo? Y en cuanto a la otredad, ¿sigue siendo un miedo latente que paraliza los cambios necesarios para esta sociedad de consumo?

La historia contemporánea de Chile reproduce los cánones de discriminación, intolerancia y exclusión que provienen de su Constitución Política colonial. La obstrucción de la vía chilena al socialismo en 1973 instaló, como una especie colectiva de regresión neurótica, el miedo a la otredad. Se nos impuso desde arriba una homogeneidad postiza: todos unidos y reunidos, manu militari, en el rechazo visceral a la diversidad. Cada quien quedó arrinconado en su estrechez identitaria.

¿Y luego de 30 años con el estallido social?

El estallido social de octubre de 2019, pocas veces visto o entrevisto, es a mi parecer una reivindicación cultural de décadas, o quizás siglos, ante tantos enmascaramientos, silenciamientos, arrogancias. Se abrieron todas las heridas coloniales y patriarcales. Procesar y sanar todo esto nos tendrá ocupados por un buen y largo tiempo.

En este mismo sentido, ¿Cuál es el desafío mayor para las ciencias y las humanidades?

En el campo de las ciencias y las humanidades tenemos un desafío mayor y común: caminar hacia una convivencia no más determinada por el binarismo grecolatino excluyente y reduccionista de civilizados y bárbaros, sino atrevernos a la armonía y la creatividad de una proximidad viva con todas las culturas de la humanidad, especialmente las nuestras, las indígenas, las mestizas, las acalladas.

Visualiza la conferencia completa, aquí:

¿Cuál es la principal forma de contagio del COVID-19?

¿Cuál es la principal forma de contagio del COVID-19?

El Coronavirus se transmite de una persona a otra por contacto directo, indirecto (a través de objetos o superficies contaminadas) o cercano con personas infectadas por medio de las secreciones bucales y nasales.

Para evitar el contacto con estas gotículas, es crucial mantenerse al menos a un metro de distancia de los demás, lavarse las manos con frecuencia y cubrirse la boca con el codo al estornudar o toser.

El académico de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Santiago, Dr. Ignacio Silva, nos entrega importante información para prevenir contagios en el contexto que se aproxima de Fiestas Patrias. Cuidémonos juntos.
 

Hernán Frigolett, académico y economista: “Un tercio de los chilenos está con un nivel de ingreso extremadamente disminuido”

Hernán Frigolett, académico y economista: “Un tercio de los chilenos está con un nivel de ingreso extremadamente disminuido”

Hernán Frigolett, docente de la Usach, se refirió en Razones Editoriales a las preocupantes cifras de desempleo y nivel de ingresos en Chile producto de la pandemia. Es urgente generar “algún tipo de apoyo a las mujeres que han sido desplazadas del mercado laboral”, señaló.

La Encuesta Bicentenario 2020 de la Universidad Católica reveló que un 52% de los encuestados señaló haber tenido pérdidas en sus ingresos que ascienden a la mitad o incluso más respecto de su situación previa al coronavirus. Mientras que un tercio de ellos ha perdido el total de sus ingresos.

Al respecto, el economista  dijo que “la estrategia sanitaria inicial y su fracaso nos hizo perder un mes y medio, por lo que tuvimos que tener una cuarentena extremadamente prolongada y muchas pymes debieron cerrar o declararse en quiebra”.

Agregó que es esencial mantener los programas de protección al empleo y “diseñar un ingreso familiar de emergencia que se vaya manteniendo” durante el tiempo que dure la emergencia, con especial eje en las mujeres que han debido dejar el mercado laboral, por labores de cuidado.

Escuche su análisis en el siguiente podcast de Radio Usach
 

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