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Madera contralaminada mejor opción para construcciones en altura

Madera contralaminada mejor opción para construcciones en altura

  • Propiedades antisísmicas, aislantes, de menor combustión para hacer frente a los incendios y sustentable ecológicamente, serían algunas de las características extraordinarias que ofrece la madera contralaminada para construcciones en altura. Esto quedó demostrado a partir del estudio liderado por la académica del Departamento de Ingeniería en Obras Civiles, Paulina González.  El lunes 18 de mayo se lanza el libro que recoge en  detalle los resultados de la investigación competente.

 




Un sistema innovador para la construcción de edificios de más de dos pisos, a base de madera contralamina, es lo que propone un señero estudio dirigido por la académica del Departamento de Ingeniería en Obras Civiles, Paulina González.

La madera contralaminada está construida en base a tres capas de tablas dispuestas paralelas entre sí, “que se unen con adhesivos especiales, con la dirección de la tabla en noventa grados”, dice Paulina González mientras agrega que “esto le da una alta capacidad resistente porque la madera tiene propiedades físicas y mecánicas distintas en tres direcciones”.

La tecnología  que propone la académica González se utiliza en varios países; sin embargo, la diferencia con Chile, es que se desarrollaría en base a una madera de gran arraigo nacional: el pino radiara.

Chile está entre los primeros países con mayor superficie plantada  de pino radiata, dice González, mientras añade que “junto con desarrollar este proyecto, podemos darle valor agregado a nuestra madera, tratar de resolver el déficit habitacional que tiene el país y establecer un sistema que permite construir un edificio cuyos elementos estructurales, muros y losas, son en base al nuevo producto”.

Propiedades superiores

Según las investigaciones de Paulina González, construir un edificio en base a madera contralaminada tiene muchas ventajas sobre otros materiales como el hormigón armando. Por ejemplo, que sea prefabricado implica menores tiempos de edificación y un ambiente más limpio.

“Se llega con los muros y lozas, y armas el edificio como un mecano. Se reducen los tiempos de construcción a un tercio respecto a un edificio tradicional de hormigón amado de albañilería”, explica González.

Además, la madera contralaminada tiene propiedades antisísmicas. El hormigón armado al pesar seis veces más que ésta, genera mayores fuerzas sísmicas que en un edificio construido con CLT. “Al ser edificado como un mecano, con conectores de acero, toma una flexibilidad que evita su destrucción”, agrega González.

Asimismo, para construir un edificio con madera contralaminada se requiere menos tiempo, lo que eventualmente puede ser una solución frente a las tareas de reconstrucción en zonas afectadas por catástrofes naturales.

“Se reducen los tiempos de construcción a un tercio; Los costos también. Los de obras gruesa disminuyen en un 35% y el total, luego de la instalaciones, a un 10%”, explica González sobre los beneficios económicos que trae la CLT.

El pino radiata, base del producto que la investigadora González ha estudiado, es sustentable para el medio ambiente. Primero porque su huella de carbono, o totalidad de gases de efecto invernadero que emite, es muy baja; segundo, porque el árbol es de rápido crecimiento y comprende vastas zonas de plantación en el país.

“Es sustentable porque la madera retiene la huella de carbono, que es prácticamente cero. Además, el pino radiata es de rápido crecimiento, por eso en Chile hay tantas plantaciones”.

Un material seguro

“La madera, dependiendo de su espesor, al quemarse genera un carboncillo exterior, que sirve de aislante para que no penetre el calor y el fuego en su interior”, dice González derribando  el mito de que este material es frágil.

“Resiste mucho  más tiempo que incluso un edificio de acero. La capacidad de éste, se reduce a la mitad expuesto a 400 grados Celsius. En cambio la madera permanece estable, por la capa de carboncillo”, añade.

A eso se agrega que la madera es un mejor aislante acústico que el hormigón armado.

El proyecto CORFO

El proyecto CORFO  12BPC2-13553 “Estudios de Ingeniería para Introducir en Chile un Sistema Constructivo de Rápida Ejecución para Edificios de Mediana Altura, Utilizando Elementos de Madera Contralaminada”, tuvo una duración de dos años; sin embargo, en la Facultad de Ingeniería se habían realizado investigaciones previas en la materia. Por eso, tras todo este proceso, “llegamos a la conclusión de que el CLT es el mejor sistema para un país sísmico, considerando el uso de la madera”, dice González.

“Somos los primeros en hacer un proyecto de este tipo en Chile, con este sistema para edificios  de mediana altura”, añade.

La profesora González es optimista respecto al futuro que pueda tener la CLT en nuestro país, a raíz de la experiencia en la materia en otros Estados del mundo. “En Vancouver (Canadá) están proyectando un edificio de 18 pisos y están haciendo un concurso para uno de 30 pisos”, explica.

En base a la investigación, se desarrolló el libro ‘Sistema Constructivo en Madera Contralaminada para Edificios’, que detalla, entre otras cosas, estudios precedentes en torno al tema, y un señero diseño de un edificio de cuatro pisos en base a  CLT.

El volumen se lanzará el lunes 18 de mayo, a las 12 horas, en el Salón de Honor de Corporación, y contará con la presencia del rector, Dr. Juan Manuel Zolezzi Cid.

Madera contralaminada mejor opción para construcciones en altura

Madera contralaminada mejor opción para construcciones en altura

Un sistema innovador para la construcción de edificios de más de dos pisos, a base de madera contralamina, es lo que propone un señero estudio dirigido por la académica del Departamento de Ingeniería en Obras Civiles, Paulina González.

La madera contralaminada está construida en base a tres capas de tablas dispuestas paralelas entre sí, “que se unen con adhesivos especiales, con la dirección de la tabla en noventa grados”, dice Paulina González mientras agrega que “esto le da una alta capacidad resistente porque la madera tiene propiedades físicas y mecánicas distintas en tres direcciones”.

La tecnología  que propone la académica González se utiliza en varios países; sin embargo, la diferencia con Chile, es que se desarrollaría en base a una madera de gran arraigo nacional: el pino radiara.

Chile está entre los primeros países con mayor superficie plantada  de pino radiata, dice González, mientras añade que “junto con desarrollar este proyecto, podemos darle valor agregado a nuestra madera, tratar de resolver el déficit habitacional que tiene el país y establecer un sistema que permite construir un edificio cuyos elementos estructurales, muros y losas, son en base al nuevo producto”.

Propiedades superiores

Según las investigaciones de Paulina González, construir un edificio en base a madera contralaminada tiene muchas ventajas sobre otros materiales como el hormigón armando. Por ejemplo, que sea prefabricado implica menores tiempos de edificación y un ambiente más limpio.

“Se llega con los muros y lozas, y armas el edificio como un mecano. Se reducen los tiempos de construcción a un tercio respecto a un edificio tradicional de hormigón amado de albañilería”, explica González.

Además, la madera contralaminada tiene propiedades antisísmicas. El hormigón armado al pesar seis veces más que ésta, genera mayores fuerzas sísmicas que en un edificio construido con CLT. “Al ser edificado como un mecano, con conectores de acero, toma una flexibilidad que evita su destrucción”, agrega González.

Asimismo, para construir un edificio con madera contralaminada se requiere menos tiempo, lo que eventualmente puede ser una solución frente a las tareas de reconstrucción en zonas afectadas por catástrofes naturales.

“Se reducen los tiempos de construcción a un tercio; Los costos también. Los de obras gruesa disminuyen en un 35% y el total, luego de la instalaciones, a un 10%”, explica González sobre los beneficios económicos que trae la CLT.

El pino radiata, base del producto que la investigadora González ha estudiado, es sustentable para el medio ambiente. Primero porque su huella de carbono, o totalidad de gases de efecto invernadero que emite, es muy baja; segundo, porque el árbol es de rápido crecimiento y comprende vastas zonas de plantación en el país.

“Es sustentable porque la madera retiene la huella de carbono, que es prácticamente cero. Además, el pino radiata es de rápido crecimiento, por eso en Chile hay tantas plantaciones”.

Un material seguro

“La madera, dependiendo de su espesor, al quemarse genera un carboncillo exterior, que sirve de aislante para que no penetre el calor y el fuego en su interior”, dice González derribando  el mito de que este material es frágil.

“Resiste mucho  más tiempo que incluso un edificio de acero. La capacidad de éste, se reduce a la mitad expuesto a 400 grados Celsius. En cambio la madera permanece estable, por la capa de carboncillo”, añade.

A eso se agrega que la madera es un mejor aislante acústico que el hormigón armado.

El proyecto CORFO

El proyecto CORFO  12BPC2-13553 “Estudios de Ingeniería para Introducir en Chile un Sistema Constructivo de Rápida Ejecución para Edificios de Mediana Altura, Utilizando Elementos de Madera Contralaminada”, tuvo una duración de dos años; sin embargo, en la Facultad de Ingeniería se habían realizado investigaciones previas en la materia. Por eso, tras todo este proceso, “llegamos a la conclusión de que el CLT es el mejor sistema para un país sísmico, considerando el uso de la madera”, dice González.

“Somos los primeros en hacer un proyecto de este tipo en Chile, con este sistema para edificios  de mediana altura”, añade.

La profesora González es optimista respecto al futuro que pueda tener la CLT en nuestro país, a raíz de la experiencia en la materia en otros Estados del mundo. “En Vancouver (Canadá) están proyectando un edificio de 18 pisos y están haciendo un concurso para uno de 30 pisos”, explica.

En base a la investigación, se desarrolló el libro ‘Sistema Constructivo en Madera Contralaminada para Edificios’, que detalla, entre otras cosas, estudios precedentes en torno al tema, y un señero diseño de un edificio de cuatro pisos en base a  CLT.

El volumen se lanzará el lunes 18 de mayo, a las 12 horas, en el Salón de Honor de Corporación, y contará con la presencia del rector, Dr. Juan Manuel Zolezzi Cid.

Presentan libro que profundiza reflexión en torno al Neoconceptualismo

Presentan libro que profundiza reflexión en torno al Neoconceptualismo

  • En el auditorio del Instituto de Asuntos Avanzados (IDEA), se lanzó el libro ‘Neoconceptualismo Ensayos’, volumen editado por el investigador de dicha institución, Felipe Cussen, y los fundadores del Neoconceptualismo, Carlos Almonte y Alan Meller. Además, contó con la presentación del poeta y editor Carlos Cociña, y Martín Gubbins, director del Foro de Escritores, quienes destacaron el significativo aporte que hace la obra en cuanto a la discusión del tema. El ejemplar es parte del proyecto Fondecyt Regular 1131136 ‘Samples y loops en la poesía contemporánea’.

 



El Neoconceptualismo es un movimiento literario que nació a finales del siglo pasado. Cada obra inmersa en esta corriente, se basa íntegramente en citas de distintos textos literarios, que combinadas, construyen un nuevo relato.

Los chilenos Carlos Almonte y Alan Meller, en el año 2001,  establecieron las reglas creativas que acompañas a este estilo,  al editar ‘Neoconceptualismo El secuestro del origen’.  

En el manifiesto que acompaña esta edición, se explicita, entre otras cosas, que “está prohibido utilizar una palabra que surja de la originalidad del autor neoconceptual, se admite cualquier ajuste morfosintáctico para el montaje de las selecciones la reordenación de cualquier trozo seleccionado y la supresión de cualquier palabra y su reemplazo por otra, siempre y cuando ésta última pertenezca al Corpus seleccionado”.

Para el investigador del Institutos de Estudios Avanzados (IDEA), Felipe Cussen, la riqueza que tiene esta forma de encarar la creación literaria, se aloja en el arte que utiliza para hilvanar distintos extractos, cuyo original tinglado narrativo, otorga un sentido y vida propia.

“Es muy difícil técnicamente hablado. Hay un virtuosismo, porque los autores no están haciendo esto por pereza”. Además, “acá no hay intensión de dañar a alguien, ni mucho menos. Ellos explicitan de dónde extrajeron las citas, no están tratando de pasar por originales”, explica Cussen.

¿Qué lo hace nuevo?, se pregunta Felipe Cussen respecto a la creación de Almonte y Meller. Que “tiene una forma resultante absolutamente distinta, porque para quien lo lee genera una experiencia diferente. Acá sale algo totalmente nuevo, esa es la gracia”, reflexiona.

Para Martin Gubbins, “Almonte y Meller hacen bien lo que se proponen: Definir y valorar la apropiación como un procedimiento creativo. Lo hacen sin esconder el truco que se explica desde un principio y se contextualiza en primera persona”.

Un libro como respuesta

Catorce años más tarde, una serie de ejercicios reflexivos en torno al tema, componen el volumen presentado en el auditorio del IDEA: “Neoconceptualismo. Ensayos”. Éste nace como una respuesta a su predecesor, y hace un intento serio por problematizar y realizar un recorrido, por las aristas más interesantes del estilo.

 “Me parece que como propuesta es muy interesante en general. Se hace cargo de algo que se ocupa hace muchos años en las artes visuales y en la música”. Además “en literatura hay una noción muy purista de la creación, como si al autor le hubiese caído un rayo del cielo, y por eso, se le ocurrió escribir algo”, explica Cussen.

Por esto- concluye- “tanto el primer libro, como el segundo, ponen el énfasis en el resultado, que es donde tiene que estar”.

El libro se enmarca en el Proyecto Fondecyt Regular 1131136 ‘Samples y loops en la poesía contemporánea’, y es dirigido por Felipe Cussen. Éste, trata sobre las distintas formas de apropiación y repetición en literatura, tal como se hacen en el hip-hop al “samplear”- o tomar un extracto de un tema musical- y utilizarlo en otra obra. 

“Gran parte de hacer el libro, nació precisamente de un día en que iba caminando al centro, leyendo este neoconceptualismo, viendo no solamente las obras que habían ahí, hechas a partir de citas y apropiaciones sino también las reflexiones teóricas que están presentes. (…) Fue muy bonito, una especie de chispa para hacer la investigación”, comenta Felipe Cussen sobre el origen del proyecto.  

Presentan libro que profundiza reflexión en torno al Neoconceptualismo

Presentan libro que profundiza reflexión en torno al Neoconceptualismo


El Neoconceptualismo es un movimiento literario que nació a finales del siglo pasado. Cada obra inmersa en esta corriente, se basa íntegramente en citas de distintos textos literarios, que combinadas, construyen un nuevo relato.

Los chilenos Carlos Almonte y Alan Meller, en el año 2001,  establecieron las reglas creativas que acompañas a este estilo,  al editar ‘Neoconceptualismo El secuestro del origen’. 

En el manifiesto que acompaña esta edición, se explicita, entre otras cosas, que “está prohibido utilizar una palabra que surja de la originalidad del autor neoconceptual, se admite cualquier ajuste morfosintáctico para el montaje de las selecciones la reordenación de cualquier trozo seleccionado y la supresión de cualquier palabra y su reemplazo por otra, siempre y cuando ésta última pertenezca al Corpus seleccionado”.

Para el investigador del Institutos de Estudios Avanzados (IDEA), Felipe Cussen, la riqueza que tiene esta forma de encarar la creación literaria, se aloja en el arte que utiliza para hilvanar distintos extractos, cuyo original tinglado narrativo, otorga un sentido y vida propia.

“Es muy difícil técnicamente hablado. Hay un virtuosismo, porque los autores no están haciendo esto por pereza”. Además, “acá no hay intensión de dañar a alguien, ni mucho menos. Ellos explicitan de dónde extrajeron las citas, no están tratando de pasar por originales”, explica Cussen.

¿Qué lo hace nuevo?, se pregunta Felipe Cussen respecto a la creación de Almonte y Meller. Que “tiene una forma resultante absolutamente distinta, porque para quien lo lee genera una experiencia diferente. Acá sale algo totalmente nuevo, esa es la gracia”, reflexiona.

Para Martin Gubbins, “Almonte y Meller hacen bien lo que se proponen: Definir y valorar la apropiación como un procedimiento creativo. Lo hacen sin esconder el truco que se explica desde un principio y se contextualiza en primera persona”.

Un libro como respuesta

Catorce años más tarde, una serie de ejercicios reflexivos en torno al tema, componen el volumen presentado en el auditorio del IDEA: “Neoconceptualismo. Ensayos”. Éste nace como una respuesta a su predecesor, y hace un intento serio por problematizar y realizar un recorrido, por las aristas más interesantes del estilo.

“Me parece que como propuesta es muy interesante en general. Se hace cargo de algo que se ocupa hace muchos años en las artes visuales y en la música”. Además “en literatura hay una noción muy purista de la creación, como si al autor le hubiese caído un rayo del cielo, y por eso, se le ocurrió escribir algo”, explica Cussen.

Por esto- concluye- “tanto el primer libro, como el segundo, ponen el énfasis en el resultado, que es donde tiene que estar”.

El libro se enmarca en el Proyecto Fondecyt Regular 1131136 ‘Samples y loops en la poesía contemporánea’, y es dirigido por Felipe Cussen. Éste, trata sobre las distintas formas de apropiación y repetición en literatura, tal como se hacen en el hip-hop al “samplear”- o tomar un extracto de un tema musical- y utilizarlo en otra obra.

“Gran parte de hacer el libro, nació precisamente de un día en que iba caminando al centro, leyendo este neoconceptualismo, viendo no solamente las obras que habían ahí, hechas a partir de citas y apropiaciones sino también las reflexiones teóricas que están presentes. (…) Fue muy bonito, una especie de chispa para hacer la investigación”, comenta Felipe Cussen sobre el origen del proyecto.  

Dra. Dora Altbir es designada integrante del Consejo Superior de Ciencia de la Conicyt

Dra. Dora Altbir es designada integrante del Consejo Superior de Ciencia de la Conicyt

  • La directora del Centro para el Desarrollo de la Nanociencia y la Nanotecnología Cedenna y académica de la Facultad de Ciencia de nuestra Universidad, Dra. Dora Altbir, fue designada consejera del Consejo Superior de Ciencia de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt), por un periodo de tres años a partir del 29 de abril. La investigadora, que es la primera mujer del Plantel en asumir esta responsabilidad,  señaló que en este nuevo desafío espera contribuir a una mayor valorización de la ciencia, aportando al desarrollo integral del país.

 



 

El nombramiento fue decretado por la Presidenta de la República Michelle Bachelet y se dio a conocer en el diario oficial (idDO 900903) por orden del ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre.

Entre las tareas que como consejera asumirá la académica del Departamento de Física de la Universidad de Santiago, se cuenta colaborar con la presidencia del Consejo y la dirección de Fondecyt, así como con los Grupos de Estudio de este organismo.

La investigadora, que es la primera mujer del Plantel en asumir esta responsabilidad,  señaló que en este nuevo desafío espera aportar a una mayor valorización de la ciencia, tanto de sus aspectos teóricos como aplicados, aportando al desarrollo integral del país.

La académica Dora Altbir es Doctora en Ciencias Exactas con mención en Física y ha ocupado cargos destacados en la Universidad de Santiago, así como en otras casas de estudios superiores; es integrante de la Comisión Nacional de Acreditación y miembro Correspondiente de la Academia Chilena de Ciencias; ha sostenido una fructífera actividad investigativa y formadora, a través de publicaciones en revistas ISI, y supervisando tesis. Junto con ello desarrolla actividades docentes en pre y postgrado y ha participado en variadas conferencias de divulgación científica. 

 

Investigadores desarrollan biofungicida para combatir hongo que afecta a la uva

Investigadores desarrollan biofungicida para combatir hongo que afecta a la uva

  • Una solución tecnológica natural para combatir la Botrytis cinerea, hongo patógeno que afecta a la uva y produce importantes pérdidas económicas, desarrollan investigadores de nuestra Universidad. El estudio, que reunió a académicos de la Facultad de Química y Biología e Ingeniería, proporcionará una respuesta más amigable con el medio ambiente y la salud de las personas. La Dra. Milena Cotoras explica que “se trata de un producto natural que le da valor a un residuo, lo que es muy importante para la industria”, añadiendo que en el país se generan cerca de 100 mil toneladas de estos desechos.
 


Un fungicida natural y biodegradable fue el resultado que obtuvo la Dra. Milena Cotoras, quien lideró un proyecto financiado por la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica a través del Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondef) y su Programa IDeA.

Con estos recursos llevó a cabo el proyecto ‘Desarrollo de un fungicida producido a partir de residuos de la industria vitivinícola contra el hongo fitopatógeno Botrytis cinerea (código CA12i10054)’, con el que buscó una solución innovadora para un problema que afecta comúnmente a la industria vitivinícola: la presencia del hongo Botrytis cinérea (moho gris).

Este hongo afecta a más de 250 especies vegetales, sin embargo, suele asociarse a la industria del vino por los efectos negativos que produce en los cultivos locales, produciendo importantes pérdidas económicas en el sector. 

Un aspecto interesante de este trabajo fue que el equipo utilizó extractos de orujos de uva para elaborar esta solución, los que -hasta hace un tiempo- eran considerados como desechos. Estos residuos fueron obtenidos gracias a la colaboración de la Viña Miguel Torres, que participó como colaborador durante el estudio.

La Dra. Cotoras explica que “se trata de un producto natural que le da valor a un residuo, lo que es muy importante para la industria”, añadiendo que en el país se generan cerca de 100 mil toneladas de estos desechos.

Dentro de los resultados de este estudio también destacan el desarrollo de seis tesis de pregrado, dos publicaciones, siete presentaciones en congresos nacionales e internacionales y una solicitud de patente.

La actividad, desarrollada el pasado martes (5) en el Auditorio de la Facultad de Química y Biología, fue presidida por el Decano, Dr. Gustavo Zúñiga, y además contó con la participación de Francisco Vargas, ejecutivo de Fondef; Edgardo Santibáñez, gerente de la Dirección de Gestión Tecnológica de la Universidad; y el Dr. Isidro González Collado. También estuvo presente parte del equipo de investigación, compuesto por la Dra. Leonora Mendoza y el Dr. Rubén Bustos.

Soluciones amigables con el medio ambiente 

Durante la jornada también se presentó el Dr. Isidro González Collado, académico de la Universidad de Cádiz (España), quien se refirió a la ‘Síntesis, inspirada en la genómica, de moléculas hibridas como antifúngicos contra el hongo fitopatógeno Botrytis cinerea’, dando a conocer parte del trabajo que ha desarrollado durante 35 años junto a su equipo de investigación.

“El gran problema que existe actualmente con la mayoría de los fungicidas, es que estos permanecían en el suelo durante mucho tiempo, generando problemas ambientales y de toxicidad a los animales, aves e, incluso, a los propios humanos, porque esto se incorporaba a la cadena alimentaria y generaba algún problema”, explicó el experto en química orgánica.  

De acuerdo al especialista español, el desafío asumido por las doctoras Milena Cotoras y Leonora Mendoza va en la línea correcta, porque forma parte de los retos actuales del área, donde los esfuerzos están siendo dirigidos a conseguir soluciones efectivas, pero menos nocivas para el medio ambiente y las personas.

Según el Dr. González Collado, en el caso chileno, el hongo que genera la “pudrición gris” (Botrytis cinerea) está muy relacionado con la enología. “A lo largo de estos años, el uso de fungicidas naturales ha ido mejorando en Chile y me consta que, en los últimos años, el trabajo está orientado hacia un control natural de la botrytis para evitar restos tóxicos en los vinos”, indicó el académico.

Acercar la empresa y la Universidad 

En la actividad también participó Francisco Vargas, ejecutivo de Fondef, quien señaló que “hemos tratado de ir acercando a la empresa con las universidades, que es la única forma que tenemos nosotros de llegar a un producto, un desarrollo y una innovación”.

Además, Vargas anunció que en el mes de agosto se abrirá la cuarta convocatoria del concurso de Investigación Tecnológica de Fondef. “De esa manera, se verán prolongados los esfuerzos invertidos en la investigación y en el resultado hacia actividades que permitan obtener los impactos económicos y sociales que dan sentido a la investigación. Dicho de otra forma, es necesario generar actividad empresarial y gubernamental que permita masificar, en nuestra sociedad y los mercados, los resultados de la investigación, eso solo se logrará en la medida que se establezca una cooperación estable y de mutuo beneficio entre universidades y empresas”.  

Investigadores desarrollan biofungicida para combatir hongo que afecta a la uva

Investigadores desarrollan biofungicida para combatir hongo que afecta a la uva


Un fungicida natural y biodegradable fue el resultado que obtuvo la Dra. Milena Cotoras, quien lideró un proyecto financiado por la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica a través del Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondef) y su Programa IDeA.

Con estos recursos llevó a cabo el proyecto ‘Desarrollo de un fungicida producido a partir de residuos de la industria vitivinícola contra el hongo fitopatógeno Botrytis cinerea (código CA12i10054)’, con el que buscó una solución innovadora para un problema que afecta comúnmente a la industria vitivinícola: la presencia del hongo Botrytis cinérea (moho gris).

Este hongo afecta a más de 250 especies vegetales, sin embargo, suele asociarse a la industria del vino por los efectos negativos que produce en los cultivos locales, produciendo importantes pérdidas económicas en el sector.

Un aspecto interesante de este trabajo fue que el equipo utilizó extractos de orujos de uva para elaborar esta solución, los que -hasta hace un tiempo- eran considerados como desechos. Estos residuos fueron obtenidos gracias a la colaboración de la Viña Miguel Torres, que participó como colaborador durante el estudio.

La Dra. Cotoras explica que “se trata de un producto natural que le da valor a un residuo, lo que es muy importante para la industria”, añadiendo que en el país se generan cerca de 100 mil toneladas de estos desechos.

Dentro de los resultados de este estudio también destacan el desarrollo de seis tesis de pregrado, dos publicaciones, siete presentaciones en congresos nacionales e internacionales y una solicitud de patente.

La actividad, desarrollada el pasado martes (5) en el Auditorio de la Facultad de Química y Biología, fue presidida por el Decano, Dr. Gustavo Zúñiga, y además contó con la participación de Francisco Vargas, ejecutivo de Fondef; Edgardo Santibáñez, gerente de la Dirección de Gestión Tecnológica de la Universidad; y el Dr. Isidro González Collado. También estuvo presente parte del equipo de investigación, compuesto por la Dra. Leonora Mendoza y el Dr. Rubén Bustos.

Soluciones amigables con el medio ambiente

Durante la jornada también se presentó el Dr. Isidro González Collado, académico de la Universidad de Cádiz (España), quien se refirió a la ‘Síntesis, inspirada en la genómica, de moléculas hibridas como antifúngicos contra el hongo fitopatógeno Botrytis cinerea’, dando a conocer parte del trabajo que ha desarrollado durante 35 años junto a su equipo de investigación.

“El gran problema que existe actualmente con la mayoría de los fungicidas, es que estos permanecían en el suelo durante mucho tiempo, generando problemas ambientales y de toxicidad a los animales, aves e, incluso, a los propios humanos, porque esto se incorporaba a la cadena alimentaria y generaba algún problema”, explicó el experto en química orgánica. 

De acuerdo al especialista español, el desafío asumido por las doctoras Milena Cotoras y Leonora Mendoza va en la línea correcta, porque forma parte de los retos actuales del área, donde los esfuerzos están siendo dirigidos a conseguir soluciones efectivas, pero menos nocivas para el medio ambiente y las personas.

Según el Dr. González Collado, en el caso chileno, el hongo que genera la “pudrición gris” (Botrytis cinerea) está muy relacionado con la enología. “A lo largo de estos años, el uso de fungicidas naturales ha ido mejorando en Chile y me consta que, en los últimos años, el trabajo está orientado hacia un control natural de la botrytis para evitar restos tóxicos en los vinos”, indicó el académico.

Acercar la empresa y la Universidad

En la actividad también participó Francisco Vargas, ejecutivo de Fondef, quien señaló que “hemos tratado de ir acercando a la empresa con las universidades, que es la única forma que tenemos nosotros de llegar a un producto, un desarrollo y una innovación”.

Además, Vargas anunció que en el mes de agosto se abrirá la cuarta convocatoria del concurso de Investigación Tecnológica de Fondef. “De esa manera, se verán prolongados los esfuerzos invertidos en la investigación y en el resultado hacia actividades que permitan obtener los impactos económicos y sociales que dan sentido a la investigación. Dicho de otra forma, es necesario generar actividad empresarial y gubernamental que permita masificar, en nuestra sociedad y los mercados, los resultados de la investigación, eso solo se logrará en la medida que se establezca una cooperación estable y de mutuo beneficio entre universidades y empresas”.  

Sobresaliente lugar obtuvo nuestra Universidad en el ranking anual de solicitudes de patentes

Sobresaliente lugar obtuvo nuestra Universidad en el ranking anual de solicitudes de patentes

  • El Instituto Nacional de Propiedad Industrial (Inapi), distinguió a nuestra Casa de Estudios como la segunda universidad chilena que, durante 2014, presentó mayor número de solicitudes de patentes. “Chile posee una tradición científica que lo sitúa en posiciones de vanguardia en términos de productividad a nivel latinoamericano y eso es lo que reflejan las cifras, como la obtenida por la Universidad de Santiago de Chile”, afirmó Maximiliano Santa Cruz, Director Nacional de Inapi. El reconocimiento se realizó en el marco del Día Mundial de la Propiedad Intelectual.

 




Se trata de la premiación anual realizada por Inapi, en donde la Universidad de Santiago de Chile una vez más estuvo entre las tres universidades más destacadas en la categoría Patentes, la que se refiere al conjunto de derechos otorgados por el Estado chileno a un inventor, respecto a una nueva tecnología.

La ceremonia, realizada en el patio de Los Naranjos de la institución, fue presidida por Katia Trusich, Subsecretaria de Economía, Fomento y Turismo y, el director Nacional de Inapi, Maximiliano Santa Cruz. Por su parte, la subsecretaria señaló que el último año fue un período de consolidación para Inapi. Y, agregó que el desafío ahora es generar una estrategia de largo plazo que permita “el desarrollo de la propiedad industrial considerando de manera concreta las necesidades del país en materia de desarrollo productivo, innovación y emprendimiento”.

En tanto, el Director de Inapi fue enfático al señalar que  como institución tienen un compromiso muy importante en la tramitación de patentes. “En Chile, las universidades están haciendo un buen trabajo en patentar y, en su conjunto durante 2014, lograron casi duplicar las solicitudes de patentes presentadas el año anterior”.

Además, junto con felicitar a la Universidad de Santiago por su gran trabajo y preocupación en materia de patentes, señaló que nuestra universidad “está haciendo un buen esfuerzo en patentar, lo que deben continuar realizando y promoviendo. La generación de nuevo conocimiento a través de la actividad científica de las universidades es un instrumento fundamental para llegar al desarrollo económico, social y cultural”.

“Chile posee una tradición científica que lo sitúa en posiciones de vanguardia en términos de productividad a nivel latinoamericano y eso es lo que reflejan las cifras, como la obtenida por la Universidad de Santiago de Chile que obtuvo el segundo lugar a nivel nacional en el ránking de solicitudes de patentes del año 2014”, afirmó Maximiliano Santa Cruz, Director Nacional de Inapi.

Por su parte, Luis Magne, director de la Dirección de Gestión Tecnológica, unidad encargada de gestionar las solicitudes de patentes de la universidad, entre otras funciones, señala que “la U. de Santiago mantiene su esencia de universidad tecnológica, por lo que el énfasis está puesto en la investigación aplicada y la innovación cuya finalidad sea contribuir al bienestar de la sociedad y que sus resultados tengan impacto en Chile y el mundo”.

Según datos entregados por la Dirección de Gestión Tecnológica de la universidad, en 2014 presentó 23 solicitudes de patentes nuevas a Inapi, doblando la cifra del año anterior que la situó tercera en el ranking Inapi 2013. Además, realizó 44 solicitudes de patentes de invención y protección en organismos internacionales.

Estas patentes pertenecen a las áreas de Ciencias, Ingeniería, Tecnología y Química y Biología. Específicamente, la mayoría de ellas están en el ámbito de biotecnología, manufactura y acuicultura.

El primer lugar en la presentación de solicitudes de patentes, lo obtuvo la Universidad de Concepción, en tanto el tercer lugar fue adjudicado por la Pontificia Universidad Católica.

Buscan sistema ‘inteligente’ que realice una liberación controlada de los fármacos

Buscan sistema ‘inteligente’ que realice una liberación controlada de los fármacos

  • Los medicamentos que consumimos se liberan en el organismo en un corto período, porque están diseñados para que sean adsorbidos al momento de su ingesta, perdiendo sus efectos con el paso de las horas. De allí el enorme valor que adquieren los primeros resultados de una investigación de nuestra Universidad, que busca encontrar un sistema ‘inteligente’ para la liberación de fármacos; o sea, que realice una entrega sostenida en el tiempo de la dosis necesitada, aumentando su eficacia.

 



Comprender los mecanismos que permitirán en futuro liberar medicamentos en el lugar y momentos más adecuado fue uno de los objetivos de la investigación liderada por académico de la Facultad de Química y Biología, Dr. Eduardo Lissi.

En la actualidad, los medicamentos que consumimos se liberan en nuestro organismo en un corto período de tiempo; es decir, están diseñados para que su concentración sea adsorbida al momento de su ingesta, perdiendo con el paso del tiempo sus efectos.

Comprender los factores y procesos celulares involucrados en ello fue el motivo del estudio realizado por el investigador de nuestra Universidad, Dr. Eduardo Lissi, quien en colaboración con el grupo de Proteínas de la Facultad de Biología de la Universidad de la Habana (Cuba) y en conjunto con los investigadores Alexis Aspee  (U. de Santiago)  y Marco Antonio Soto (PUC), abordaron el tema.

"Encuentro sumamente interesante el diseño de sistemas ‘inteligentes’ para lograr un determinado efecto, ubicando el transportador en el lugar adecuado y allí poder regular la entrega de la especie bio-activa", agregó el investigador de la Facultad de Química y Biología.

Añade que está "impresionado por la magnitud del problema y por tener la posibilidad de conectar la biofísica básica con sus aplicaciones, particularmente, aquellas asociadas a la posibilidades de elaborar fármacos a la medida para un dado sistema".

Según el mismo investigador, las ventajas en la aplicación que tendría  este tipo de sistemas ‘inteligentes’ podría tender al diseño de medicamentos que se liberen "por ejemplo, cuando el organismo huésped alcanza una dada temperatura y/o un determinado gradiente osmótico", asegurando así una entrega, sostenida en el tiempo de la dosis del medicamento necesitado, aumentado su eficacia. 

Otra de las aristas de la investigación y en la  que actualmente se continúa trabajando, adelanta el profesor Lissi, está relacionada con la capacidad de toxinas hemolíticas para generar canales que contribuyan al daño celular controlado, “lo que presenta interesantes posibilidades para la muerte selectiva de agrupaciones celulares que se desean erradicar", afirmó el investigador, quien concluyó así su proyecto Fondecyt 1130867 titulado "Studies on the diffusion of small solutes through lipids bilayers in unilamellar liposomes".
 

Estudio refuta hipótesis de Darwin sobre colonización de especies invasoras

Estudio refuta hipótesis de Darwin sobre colonización de especies invasoras

  • En 1859 Charles Darwin publicó ‘El origen de las especies’, donde señaló que una especie invasora que exhibe un alto grado de parentesco evolutivo (relación filogenética) con la comunidad que invade, tendría escasas posibilidades de establecerse, pues la “lucha por la existencia” sería más intensa entre especies emparentadas. No obstante, experimentos actuales del investigador de la Facultad de Química y Biología y del CEDENNA, Dr. Sergio A. Castro, concluyeron algo diferente.

 



“Mucha gente ha aceptado, por la posición que alcanzó Darwin en la ciencia, sus hipótesis como hechos incontrovertibles. Sin embargo, muchas de ellas descansan sobre mecanismos no evaluados. Esto es una situación que se da en el desarrollo de las ciencias, ya que usualmente aparecen las observaciones, las que son puestas a prueba posteriormente”, señala el investigador del Laboratorio de Ecología y Biodiversidad de la U. de Santiago, Dr. Sergio A. Castro.

Para poner a prueba la hipótesis de Darwin, junto al equipo de investigación que dirige desarrolló un proyecto Fondecyt que dio origen a la publicación “Evaluación de Hipótesis de Naturalización de Darwin en experimento de un conjunto de plantas: Las relaciones filogenéticas no determinan colonización éxito”. Este artículo apareció en la prestigiosa revista ‘Plos One’, actualmente la revista científica más grande del mundo y con un alto factor de impacto (Q1) en relación a sus citaciones.

“A un territorio se pueden introducir diversas especies y varias pueden terminar por establecerse poblacionalmente como si fueran nativas; es decir, con independencia de la acción humana. Esto es lo que se considera una especie naturalizada. En nuestro experimento observamos la colonización de una planta sobre distintas comunidades vegetales, estas últimas con diferentes niveles de parentesco en relación a la invasora. Si Darwin tenía razón, se hubiese registrado una tendencia de establecimiento de la invasora dependiendo del parentesco evolutivo. Sin embargo, luego de tres años, evaluamos los resultados y no apoyaron la hipótesis de Darwin”, relata el académico.

El experimento se desarrolló en la localidad de Batuco y se seleccionaron 15 especies. Una de estas fue la lechuga silvestre (Lactuca), la que fue escogida como especie colonizadora o invasora y entre las 14 restantes, entre las cuales se encontraban la manzanilla, haba, rúcula, etcétera, se conformaron comunidades experimentales. Con estas plantas se desarrollaron cinco tratamientos, diferenciados por distancias filogenéticas con Lactuca, los cuales no mostraron dependencia de su colonización en relación al parentesco filogenético.

“En nuestro estudio todas las plantas pudieron convivir, independiente de sus parentescos. Por esto, los resultados manifiestan que la hipótesis de Darwin no tiene un respaldo tan sólido o por lo menos no es tan general como él lo planteaba”, indica Castro.

El investigador también ha evaluado la hipótesis de naturalización de Darwin analizando la composición de la flora chilena y las plantas exóticas que han sido introducidas. En esta publicación no solo logró concluir que la hipótesis no se cumplía, sino que emergían resultados en el sentido opuesto.

“Detectamos que una especie de otro ambiente puede llegar a Chile Central y encontrar parientes que sobreviven muy bien en este clima. Estos mismos parientes le pueden entregar polinizadores y dispersores de semillas, haciendo de su naturalización algo más probable, contrario a lo esperado por la hipótesis de Darwin”, expresa.

Proyecciones en respuesta al cambio global

A lo largo de las últimas décadas se ha observado un mayor interés de la ciudadanía en saber  cómo las diversas actividades de la humanidad afectan al medio ambiente. El foco se ha centrado en el cambio climático, obviando otros aspectos como la introducción de las especies, sea flora o fauna, en territorios donde no son nativos. Estos aspectos son observados como parte del cambio global.

“Chile es una isla biogeográfica. Tiene una cordillera, un desierto y un océano que lo aíslan, por lo que su flora ha evolucionado desde hace más de 180 millones de años aislada del mundo. Sin embargo, en los últimos siglos se han introducido especies que son un riesgo para las especies nativas”, explica el Dr. Castro.

Tal es la particularidad biogeográfica de Chile central que es considerado uno de los 35 ‘hot spot’ (puntos calientes) de biodiversidad del planeta. Estos sitios representan lugares que concentran un alto porcentaje de especies endémicas, pero que al mismo tiempo su conservación se encuentra amenazada producto del impacto humano.

“Una especie introducida puede generar la extinción de otra nativa, erosionando nuestra biodiversidad. En la actualidad, nuestra diversidad de especies de plantas exóticas es alta en comparación a la flora nativa. La pregunta es qué podemos hacer para prevenir esto. Es muy poco lo que podemos hacer en un escenario de globalización, pero sí podemos generar diagnósticos para evitar que algunas especies entren y que además se naturalicen”, sentencia el investigador del Laboratorio de Ecología y Biodiversidad de la Facultad de Química y Biología, y del Centro para el Desarrollo de la Nanociencia y la Nanotecnología (Cedenna).

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